Daisy es una joven estadounidense que está recibiendo formación para ayudar a detectar tumores malignos, así como altos y bajos niveles de azúcar, tan solo valiéndose de la potencia de su olfato. A su vez, Kaya trabaja en las Aspen Highlands y el año pasado la enviaron en helicóptero para que encontrara a una persona enterrada bajo la nieve. Mientras tanto, un joven equipo está recibiendo formación en Australia para pasar 16 meses con presidiarios como parte de un programa correccional concebido para reducir el comportamiento reincidente y para ayudar en su rehabilitación.